Tanto que cuando nos reunimos con mi socio el catalán para desentrañar el misterio de cómo meter un contenido de fútbol digital en una tablet, y nos empezamos a poner densos, paramos un poco y en los descansos nos zampamos una pizzas caseras que amaso con mis propias manos.
Y cuando ya sale del horno con su salsa, con la muzzarella que compro en una tienda de Tarragona, con el aroma del orégano… el aceite de oliva regado, las olivas… Mamma mía!
-Esta pizza sale así de una receta italiana que tengo guardada bajo un cofre, -le comento haciéndome el pizzero italiano con la bandeja a la altura de mi hombro- y agrego:
- Che boludo. dejémonos de joder con la revista y montemos una pizzería que se llame ElevenFoot.
Mi plan de negocio: Horno de piedra, una barra con sillitas, y venta por porciones: 2 porciones + 1 Rosita.. a 3 euros y con decoración muy futbolera: cuelgo ahí mis camisetas que me firmó Messi e Iniesta que las tengo bien guardadas para el local.
Se produce un silencio, no sé si lo está pensando o si realmente está calculando para robarme mi porción o está pensando en sortear mi colección de camisetas para financiar el proyecto (Si lo hace, lo mato) y me dice con la boca llena, haciéndose el argentino (que no le sale ni ahí por más que se esfuerce):
-pelotudo… sigamos haciendo la revista y de paso ábrete unas Rositas que con esta pizza quedan de puta madre.
La historia nuestra con Rosita son como esas historias de unas parejas que van dando vueltas por el mundo cada uno por su lado y al final se encuentran. Y pim-pum-pam: Un amor a primera vista
Mi socio y yo, vivimos en Tarragona. Meses atrás, haciendo un curso de creación de empresas, les conté que tuve como profesores a Ramón y Pep, qué además de ser consultores de empresas que brindan estos cursos, nos contaron que son unos tíos emprendedores (con la que cae ahora, emprender es de valientes) que se metieron sin saber nada de nada, a fabricar una cerveza artesanal.
Mientras dictaban el curso nos contaron la historia de su empresa y cómo de a poco, se metieron a hacerla. Tanto lo lograron que instalaron una fábrica en Alcover, Tarragona donde allí elaboran una cerveza que está tan buena que exportan como locos a otros países.
La Rosita es de Tarragona. Pero no es tan fácil encontrar a Rosita. No porque se resista sino porque es una cerveza Premium que se consume especialmente en restaurantes. También se puede pedir a través de su página web (haciendo click en el banner de la derecha) donde cuentan la historia de su nombre, cómo la hacen y las variedades que elaboran. Todo en un proceso artesanal.
Para los que entienden de esto les dejo estas notas de maridaje de la cerveza Rosita Original:
Cerveza rubia de color miel, de carbónico
fino y elegante, con cierta densidad en copa, espuma blanca con tonos
marfil, cremosa y constante, con buena persistencia. Debido a la
presencia de levaduras de la segunda fermentación, es turbia.
Olfativamente se muestra muy afrutada, con mucha persistencia del grano
infusionado, notas a plátano y manzana roja, recuerdos a melazas y
tostados muy sutiles, muy compleja. En boca es dulce y golosa al
principio, para pasar a notar todo su volumen aromático y gustativo con
un paso denso y graso. Las notas a grano tostado, recuerdos a miel y
fruta madura, son ahora donde cogen su máxima esplendor. Su buena acidez
hace que su paso por boca no resulte pesado y podamos disfrutar de toda
su complejidad.
El postgusto es elegante, con un fino
amargor, balsámica, muy sutil, lo que nos deja una boca limpia y muy
fresca, sin sensación de pesadez. Recomendamos tomar fría, no helada, la
baja temperatura le restaran potencial aromático y gustativo.
Temperatura óptima de servicio: 5º / 7 º C.
Maridaje:Ideal como
aperitivo. Su sutil amargor y su frutuosidad, la hace ideal para
productos difíciles de maridar; espárragos verdes, alcachofas,
ensaladas, verduras a la parrilla, caracoles (con salsa, hervidos, a la
“llauna”…)
Aguanta bien las carnes blancas i
pescados azules. Ahora bien, su mejor maridaje es la tranquilidad y la
calma para tomarla, una buena compañía y una mejor charla. Como todo en
la vida, lo bueno siempre es para compartir!
Composición: Agua, malta de cebada, azúcar, miel, lúpulos y levaduras.
Y como dicen lo bueno siempre es compartir, Rosita también comparte nuestras historias en la mesa de amasado del proyecto digital ElevenFoot, con pizza y amigos.
Porque para nosotros esta revista la hacemos de la nada, a partir de la generosidad de nuestros amigos que nos van dando su tiempo, su talento y también su ilusión de ver cómo vamos avanzando.
Mientras tanto hacemos pizza y brindamos con Rosita y seguimos con el proyecto que cuando salga… se me ocurre que haremos un lanzamiento muy a la nuestra.
Con Pizza de papone.
Y con La Rosita para los amigos.